martes, 26 de abril de 2016

Bebé de cinco meses

Cómo crece un bebé de 5 meses, física y mentalmente

El bebé de cinco meses está cada día más espabilado. Ya posee la habilidad para transferir los objetos de una mano a otra y es capaz de sujetar el biberón él solito. Ahora querrá llevarse todo a la boca para probarlo.
Empieza a lamer, a arañar y chupar todo lo que esté a su alcance. Respecto a su alimentación, ya se empiezan a introducir sus primeras papillas. Una aportación enérgica buena debido a su alto contenido en hidratos de carbono, además del aporte de proteínas, minerales y vitaminas.

El desarrollo del bebé de cinco meses
En cuanto a su movilidad, el bebé ha experimentado una gran movilidad, ya que es lo bastante fuerte para levantar la mitad superior de su cuerpecito apoyando los brazos. Durmiendo también se mueve y puede que dé la vuelta si lo dejas solo en la cuna.
Demostrará su deseo de coger a alguna cosa con más empeño, y se enfadará y gruñirá si no consigue sus propósitos. Le gusta llamar tu atención, porque sabe que acudirás en su busca.
Le encanta que le cojan en brazos y le mimen. Para mejorar susestímulos responde a su llamada cada vez que te llame y habla mientras vas hacia él para que se vaya percatando de tu cercanía.

Los reflejos del bebé de cinco meses
Ya no sonríe a todos. Algo cambia en su comportamiento. Sonríe delante de un rostro familiar y a la vez se muestra serio y miedoso o vergonzoso en la presencia de personas a quienes no conoce. Su percepción se esmera, pues el bebé puede diferenciar una voz amable de otra menos amable y reaccionar a ellas de distintas maneras.
En esta etapa, empieza el juego con los pies. En esta etapa de su desarrollo, tiene lugar el momento en que se miran y se identifican en el espejo. Puede que se asuste al principio, pero después querrá tocarlo y lamerlo, sonreír delante de él, y empezar a emitir toda clase de sonidos. Ya hace pedorretas y emite sonidos y palabras como "ejj", "ma" "da", etc. Para él todo será un juego alegre y divertido.

La alimentación del bebé en el quinto mes de edad
Entre los cinco y seis meses de vida se introducirá la alimentación complementaria del bebé. En cualquier caso, a los cinco meses los bebés están perfectamente alimentados y reciben todos los nutrientes necesarios a través de la lactancia materna o la lactancia artificial si la madre no puede amamantarle. 

Cómo estimular al bebé de cinco meses de vida
Cada vez el babé tiene más capacidad para jugar y relacionarse por lo que los juegos de estimulación son ideales para esta etapa de su vida. Puedes tumbar al bebé boca abajo y dejar un jueugete cerca de él para que intente cogerlo.
Cantar al bebé, ponerle música clásica, darle masajes o dejar que toque objetos de diferentes texturas son actividades que relajarán al bebé, lo entretendrán y además, estimularán sus sentidos.

lunes, 25 de abril de 2016

Cómo afecta a los hijos la ausencia de la figura paterna

Reacciones
La figura paterna, aunque necesaria e insustituible, tiene  la posibilidad de un relevo que, bien manejado por  la madre, puede permitir que la ausencia o desapego afectivo que se impone por diversas causas no afecte el desarrollo emocional y psicológico de los  hijos.
Mientras muchos hijos se afectan ante la ausencia de la figura del padre, otros salen fortalecidos de esa carencia. Suelen ser aquellos que posteriormente se convierten en verdaderos líderes.  Resultado este, de una corriente psicológica de los últimos tiempos fomentada por los especialistas y que, por fortuna, cada vez  toma mayor fuerza.
“Dependerá  de cómo fue esa  ruptura con el padre  y también de las características de personalidad de cada quien.  Nunca se logra sustituir por completo”, explica la psicóloga Luz Sosa Ruiz, quien a su vez asegura que hay muchas variables y muchos elementos a tomar en cuenta, en lo que influirá posteriormente en su desarrollo psicológico y emocional.

Entre esas razones figura  el hecho de si el niño nunca conoció a su padre, bien sea por fallecimiento u otra causa,  que los padres se separen o se divorcien, hijos que las madres deciden tener a pesar de esa ausencia de los padres y ellas se comprometen totalmente a echarlos hacia adelante… 
Algunos niños –continúa-  cuando nunca conocen a su padre se cuestionan seriamente el porqué ha ocurrido, y muchos, hasta terminan sintiéndose culpables por esa carencia.

“La familia de la madre intenta suplir la carencia con la figura de un abuelo, un padrino, tío,  pero esa ausencia nunca se logrará llenar del todo, porque es una figura importante”, dice.
Si el niño nunca ha tenido contacto con el padre y  ve que entre sus amiguitos algunos están en situación similar, la ausencia la procesa mejor.
“Ahora bien, si lo ha conocido, depende mucho del tipo de padre que haya sido. Hay padres cuya ausencia, por la razón que sea, suponen un duelo muy grande en la vida del niño, porque ha sido un padre cercano, una verdadera figura con la cual identificarse. En ese caso, la situación es mas difícil porque es muy significativa la pérdida y la carencia, sin importar la edad”, agrega.

Se dice que entre los cuatro a siete años es que se plantea en la vida (del hijo) el modelo masculino, la identificación sexual que le corresponde al niño con el padre.
Por otro lado, están los preadolescentes y adolescentes, “en esa etapa  aparentemente no les interesa tanto esa figura pero cuando carecen de ella se resienten y a veces lo expresan con conductas inadaptadas como rebeldía, ausentismo escolar, desmotivación o algo peor todavía, oponiéndose a los patrones y normas  social, cultural y moralmente  aceptados en su hogar. Eso va a depender mucho del entorno y de cómo la madre sea capaz de sustituir  o  tratar de representar a ese papá”, subraya Luz.

Es muy importante que si el padre no ha fallecido,  éste  busque las formas,  cualesquiera que sean, de hacerse presente en la vida de los hijos.
Existen  padres divorciados, separados,  que mantienen una relación próxima con sus hijos y con su ex pareja, comportando cierta armonía  en favor a ese hijo.
“Porque se deja de ser cónyuge, pero no se deja de ser hijo, ni se deja de ser padre. Cuando eso se asume y no se cae en la idea generalizada  de que el hombre cuando deja a la mujer deja a los hijos, el padre puede convertirse no en la misma figura que era antes,  pero sí en una figura cercana”.

Ese hombre intenta cubrir con calidad lo que falta en cantidad. “La calidad del trato, la proximidad, la representación como padre ante la institución escolar  y en todos los momentos esenciales en los que  cada hijo siente que tiene algo especial”, explica Ruiz.
Es importante también la presencia de  la familia paterna en la vida de los hijos, que no se rompa ese nexo familiar.  El hijo  no interrumpe totalmente con lo que son sus raíces. Percibe un cambio en la forma y en el momento en que papá va a estar.

En contraposición a padres que se desentienden de sus hijos, existen  otros  que mantienen un contacto a diario,  aunque no vivan con ellos.  El amor bien llevado siempre hace bien y esa proximidad es un gesto de amor, es mantener ese nexo biológico que debe durar toda la vida  “Es excelente que el papá siga estando presente y  no únicamente en el aspecto de la provisión material, sino  el proveedor de afectos,  de vínculos sociales”.

¿Y cuando el manejo no es saludable?
Hay muchas maneras de reflejarse cuando el manejo no es saludable. Ahí  entra el rol de la madre como decisivo.  Si la madre se resiente y transfiere su dolor  al hijo,  éste  sentirá ese rechazo y manifestará  una ira interna de “por qué me dejaste, si yo soy tu hijo… si compartíamos”. “Eso no ocurre cuando  la madre sabe manejarlo, sin endiosar la figura, porque hay madres que encubren y hasta pretenden justificar esa  ausencia”, apunta Luz.
La especialista en la conducta humana recomienda escuchar y acompañar al hijo, “cargar doblemente, porque tiene que hacer las dos funciones, padre- madre. Si el hijo se lo demanda,  tratar de dar una explicación sin asumir culpa, porque ella no es la responsable  ni la culpable de ese abandono, pero tampoco sin descargar su ira en esa relación que falla”.
Los efectos de esa carencia de afecto  varía y depende del entorno. En la clase social baja la gran cantidad de los niños crecen solo con las madres y a veces sin ninguno de los dos, porque para la madre poder asumir la manutención de los hijos tiene que ir a trabajar y ellos quedarse con abuelos, tíos, sobrinos, vecinos, entonces la figura del padre, quizás, ahí es menos importante porque esa carencia la comparten muchos de su entorno social.  En cambio, “la clase media y alta mantiene más el vínculo conyugal por diferentes razones: económicas, sociales, legales… y cuando el padre no está el muchacho se reciente más”, subraya la experta.

En consecuencia, el hijo puede  manifestar aislamiento, ira, culpabilidad hacia la madre porque entiende que ella no supo mantener al padre a su lado. “Como también,  se aíslan del afecto del padre cuando se presenta, cuestionándole su ausencia. Comienza a convivir sin tomarlo en cuenta”. Otros, en su añoranza del padre,  fabulan y lo encubren,  a modo de justificar su ausencia,  un mecanismo a través del cual mantienen la ilusión de que tienen un padre que los ama.

Fortalecidos de la carencia 
A veces ocurre todo lo contrario y  el hijo, en lugar de ser negativo y aislarse,  asume que es importante y se propone demostrarlo.  Son aquellos que llegan a convertir se en verdaderos líderes. “Salen fortalecidos de la carencia, una conducta que en la corriente psicológica  cada vez  toma mayor fuerza.  Se fomenta  al individuo para que pueda establecer todo un repertorio emocional de enfrentamientos y afrontamientos de dificultades, sin depresión y con el menor daño”.

domingo, 24 de abril de 2016

2ª ETAPA: De 5 a 6 meses

A. ALIMENTACIÓN
1. INICIO DE LA ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA.
Esta etapa resulta esencial en la vida del bebé, pues es en este período cuando se va a iniciar la diversificación de su dieta hacia la alimentación complementaria: es decir, sin dejar de utilizar la leche, se empiezan a introducir nuevos alimentos. Es lo que se conoce con el término "Beikost", palabra utilizada para designar cualquier alimento a incluir en la dieta del bebé que no sea la leche. La introducción de los mismos depende de muchos factores, pero no deberán ser administrados antes de los 5 meses.
¿Por qué a partir de los 5 meses?
A partir de los 5 meses se produce la maduración de órganos y sistemas, con una mejoría de la secreción gástrica y pancreática, así como la movilidad intestinal y la respuesta inmunológica. En este periodo se podrá comenzar con los cereales y con la fruta. La leche en este tiempo se continúa con fórmula de inicio, en el caso que el bebé no esté lactado al pecho.

En los lactantes considerados de muy elevado riesgo alérgico, la alimentación complementaria no se iniciará hasta después de los 7 meses, y todo este primer semestre estará con lactancia materna o en su defecto con una fórmula adaptada indicada por su pediatra.

A partir de los 6 meses se comenzará con los distintos alimentos, pero de forma más lenta que lo habitual y se retrasarán mucho los alimentos más susceptibles de producir alergia tales como huevo, pescados y algunas verduras. Sólo a partir de los 2 años tendrá el niño una dieta similar a la del adulto, con la introducción de todos los tipos de alimentos.
A los 6 meses, el bebé tiene capacidad de transportar y tragar alimentos semisólidos puestos en la parte anterior de la boca. Desaparece el reflejo de extrusión. Controla la musculatura labial para cerrar la boca, tiene movimientos de lengua hacia atrás y adelante y mueve hacia dentro el labio inferior cuando se retira la cuchara. A esta edad, hay también un aumento de la secreción de ácidos biliares y de la secreción pancreática, por tanto aumenta la capacidad de digestión y absorción de alimentos más complejos.
No obstante, la barrera intestinal, al tener mayor permeabilidad, es más vulnerable a la entrada de sustancias potencialmente lesivas. En este período además, el sistema inmunitario intestinal no está completamente desarrollado, por lo que el lactante está más fácilmente expuesto al riesgo de infecciones y de hipersensibilidad, por la inmadurez de los mecanismos de defensa contra algunos problemas.

El Beikost cumple, por consiguiente, un papel tanto educativo como nutricional, desempeñando una labor importante en el desarrollo de los sentidos, ya que en el acto de comer existe una gran estimulación sensorial que es fundamental para que el niño adquiera sus futuros hábitos alimentarios.

2. INTRODUCCIÓN DE LAS PAPILLAS DE CEREALES A PARTIR DEL 5º MES.

Los cereales son el primer alimento no lácteo que se introduce en la alimentación de los lactantes en forma de papillas.
Su aportación energética es buena, debido a su contenido en hidratos de carbono relativamente elevado. También contribuyen al suministro de proteínas, minerales y vitaminas, además de ácidos grasos esenciales.
Todos ellos se presentan parcialmente hidrolizados, lo que favorece la digestión por una amilasa pancreática que en ocasiones no está lo suficientemente desarrollada, además de una mejor solubilidad en el agua o la leche.
En la actualidad, todas las papillas de cereales infantiles se presentan como papilla instantánea. Esto supone que los cereales que la componen han sido tratados para conseguir una reconstitución inmediata sobre leche/agua y favorecer a su vez la digestión.
En este sentido, la diferencia entre las papillas radicará en las distintas tecnologías aplicadas en el proceso de fabricación y en el tratamiento de los almidones.
Algunos preparados se obtienen de un solo cereal, mientras que otros contienen mezcla de varios.

El gluten
Es muy importante recordar, de forma muy insistente, que hay cereales que contienen un compuesto proteico llamado GLUTEN, como son el TRIGO CENTENO, la CEBADA y la AVENAque en algunos casos puede provocar la enfermedad celiaca. Por ello su introducción será después de los 6 meses y se realizará con mucho cuidado.
A partir del 5º mes los cereales que se suministrarán al bebé son SIN GLUTEN (principalmente el maíz y el arroz). La administración de papillas de cereales supone un mayor valor energético y una absorción más lenta de los nutrientes.
Esto conlleva un mantenimiento más prolongado de la glucemia (glucosa en sangre) y, por tanto, un retraso en la aparición de la sensación de hambre, permitiendo con ello un mayor esparcimiento de las tomas.
Las papillas de cereales se incorporan primeramente en el biberón, en una concentración del 3-5%, para unos meses más adelante prepararse en el plato a una concentración del 8-12% incorporando el trigo como cereal básico.

3. INTRODUCCIÓN DE LAS FRUTAS A PARTIR DEL 6º MES.
La fruta suele ser el segundo alimento no lácteo que se introduce en la dieta, aunque no hay argumentos científicos importantes que demuestren ventajas sobre el orden de introducción de cereales o frutas.
Las frutas son ricas en agua, hidratos de carbono, residuos como la celulosa, vitaminas (especialmente la vitamina C) y minerales.
Su introducción se puede iniciar en zumo, en papillas o en Potitos® hechos con manzana, plátano maduro y pera, al que se le añade zumo de naranja, y posteriormente fruta variada del tiempo.
Se deberán evitar frutas potencialmente alergénicas, tales como las fresas, fresones, frambuesas, moras y kiwi, pues son capaces de liberar histamina y producir manifestaciones alérgicas. Igualmente, se deben dar distintas variedades de frutas para favorecer el aprendizaje alimentario y potenciar el desarrollo de los sentidos. Es conveniente que sea madura o incluso cocida porque es más digestiva, aunque en esta última se pierda el componente vitamínico, el cual puede compensarse ofreciendo al bebé zumo de fruta fresca, preferentemente cítricos.
Las papillas sólo de frutas no tienen la energía de una toma de biberón, por lo que el bebé no se queda tan lleno. Por tanto, es conveniente añadir a las mismas alguna harina sin gluten desde el comienzo de sus tomas y posteriormente, después del 6º ó 7º mes, adicionar harinas con gluten o galletas.

RESUMEN NORMAS GENERALES DE
ALIMENTACIÓN HASTA LOS 6 MESESE
da Biberones al día Hasta 4-6 mesesLeche materna o fórmula adaptada 5-6 meses Cereales sin gluten, Zumo de naranja (administrado a cucharaditas)

Otras recomendaciones:
No son necesarios suplementos de sal o azúcar en la alimentación del lactanteLos purés de verduras no deben llevar, en un principio, sal ni aceiteLos purés de fruta no deben llevar galletas: éstas se suelen sustituir por unos cacitos de los cereales que tome el niñoLos lactantes deben recibir suplementos de vitamina D3 durante el primer año de vida, y en ocasiones suplementos de hierro de los 3 a los 5 meses de edad.

B. PAUTAS DE DESARROLLO
El bebé empieza a coordinar movimientos con las manos al 5º mes y ya pasa objetos de una mano a la otra.Además el bebé comienza a  mirar sus propias manos, etc.Es capaz de sentarse sin apoyo a los 6-7 meses y al poco tiempo ya es capaz de girar sobre si mismo.A los 6 meses comenzará un balbuceo monosilábico
C. VACUNAS (Pulsar para ver el calendario vacunal de la AEP)
D. RÉGIMEN DE VIDA
Baño diario, limpieza de pañales, paseoSe puede empezar a ponerlo semisentado en la silla, pero sin forzarSeguirá objetos con las manos e intentará cogerlos. Se divierte jugando con los pies y las manosEl niño todavía no coordina bien los movimientos oculares y en ocasiones puede parecer bizco. Esto es normal ya que a esta edad todavía no tienen acomodación visual.

E. PREVENCIÓN DE ACCIDENTES
Precisa una vigilancia constante, no dejar solo en la bañera o en superficies elevadas. Tampoco lo deje con hermanos pequeños ni con animalesMantener fuera del alcance de los objetos menores de 5 cm o que tengan elementos que puedan desprenderseProtéjalo del sol y vigile que el cochecito no esté en la calzada mientras espera en la acera para cruzar la calle.

F. VIAJAR EN COCHE
Para viajar en el coche debe colocar al bebé en un asiento de seguridad homologado según la normativa de la Comunidad Económica Europea.
Para niños de 5-6 meses los principales asientos de seguridad son los siguientes:
Arnés de seguridad para el capazo: es una estructura que se vende aparte del coche de paseo y sirve para fijar el capazo del coche de paseo al asiento trasero del coche. La principal desventaja es que ocupa todo el asiento traseroSilla cesta de seguridad: es una sillita pequeña e inclinada, que recoge todo el cuerpo del bebé. Se puede colocar tanto en el asiento trasero como en el delantero para evitar distracciones. No debe colocarse en el delantero si éste tiene air-bag o lo tiene conectado. Debe utilizarse hasta los 10 kg o hasta que el niño quepa. Se coloca siempre en dirección contraria al sentido de la marcha y se acopla con el propio cinturón de seguridad del coche. Colocar al niño en contra del sentido de la marcha ayuda a dar más protección a la cabeza en caso de accidente. Es el sistema actualmente preferido por los fabricantes

sábado, 23 de abril de 2016

¿Sabías que la inteligencia se hereda de la madre?

Las personas inteligentes deben agradecerles a sus madres ya que, según la ciencia, son ellas las encargadas de transmitirle los genes relacionados con la inteligencia. Por tanto, quizá los estereotipos de género que hemos arrastrado a lo largo de tantos siglos estén a punto de dar un vuelco radical. Las madres solteras que quieran tener un hijo inteligente no necesitan buscar a un Premio Nobel en un banco de esperma y es probable que los hombres comiencen a encontrar en la inteligencia de las mujeres su mayor atractivo.
En la base de esta idea se encuentra lo que se conoce como “genes condicionados”, los cuales se comportan de manera diferente según su origen. En práctica, estos genes tienen una especie de etiqueta bioquímica que permite rastrear su origen e incluso desvela si son activos o no dentro de las células de la descendencia. Curiosamente, algunos de esos genes condicionados solo funcionan si provienen de la madre. Si ese mismo gen se hereda del padre, es silenciado. Obviamente, otros genes funcionan de manera contraria; es decir, solo se activan si provienen del padre.

Las células de la madre se dirigen a la corteza cerebral, las del padre al sistema límbico
Sabemos que la inteligencia tiene un componente hereditario, pero hasta hace poco se pensaba que este dependía tanto del padre como de la madre. Sin embargo, diferentes investigaciones desvelan que los niños tienen mayores probabilidades de heredar la inteligencia de su madre ya que los genes de la inteligencia se encuentran en el cromosoma X.

Una de las investigaciones pioneras en este ámbito se realizó en el año 1984, en la Universidad de Cambridge. Este estudio analizó la coevolución del cerebro y el condicionamiento del genoma, para concluir que los genes maternos contribuyen en mayor medida al desarrollo de los centros de pensamiento del cerebro.
En aquel estudio los investigadores crearon unos embriones de ratones especiales que tenían únicamente los genes de la madre o los del padre. Sin embargo, cuando llegó el momento de trasladarlos al vientre de un ratón, los embriones murieron. Así fue como se descubrió que existían genes condicionados que se activaban solo cuando eran heredados de la madre y que son vitales para el desarrollo adecuado del embrión. Al contrario, el legado genético del padre es esencial para el crecimiento de los tejidos que más tarde forman la placenta. 

En aquel momento los investigadores hipotetizaron que si esos genes eran tan importantes para el desarrollo del embrión, era probable que también desempeñaran funciones relevantes en la vida de los animales y las personas, quizá incluso podrían determinar algunas funciones cerebrales. El problema era cómo demostrar esa idea ya que los embriones con genes de un solo progenitor morían rápidamente.

Los investigadores encontraron la solución: descubrieron que los embriones podían sobrevivir si mantenían las células embrionarias normales y manipulaban el resto. Así crearon diferentes ratones manipulados genéticamente que, asombrosamente, no se desarrollaron de la misma forma. 
Los que tenían una dosis extra de genes maternos desarrollaron una cabeza y un cerebro muy grande, pero tenían cuerpos pequeños. Al contrario, los que tenían una dosis extra de genes paternos tenían cerebros pequeños y cuerpos grandes. 
Al profundizar en estas diferencias los investigadores identificaron células que solo contenían genes maternos o genes paternos en seis partes diferentes del cerebro que controlaban distintas funciones cognitivas, desde los hábitos alimenticios hasta la memoria. 

En práctica, durante los primeros días de desarrollo del embrión, cualquier célula puede aparecer en cualquier parte del cerebro, pero a medida que los embriones maduran y crecen, las células que tenían los genes paternos se acumulaban en algunas zonas del cerebro emocional: el hipotálamo, la amígdala, la zona preóptica y el septum. Estas áreas forman parte delsistema límbico, que es el encargado de garantizar nuestra supervivencia y está involucrado en funciones como el sexo, la alimentación y la agresividad. Sin embargo, los investigadores no encontraron ninguna célula de los padres en la corteza cerebral, que es donde se desarrollan las funciones cognitivas más avanzadas, como la inteligencia, el pensamiento, el lenguaje y la planificación.

Nuevos estudios, nuevas luces
Por supuesto, los científicos han continuado investigando esta teoría. Años más tarde, Robert Lehrke desveló que gran parte de la inteligencia de los bebés depende del cromosoma X. Además, demostró que como las mujeres tienen dos cromosomas X, tienen el doble de probabilidades de heredar las características vinculadas a la inteligencia. 
Recientemente, investigadores de la Universidad de Ulm en Alemania estudiaron los genes involucrados en los daños cerebrales y descubrieron que muchos de ellos, sobre todo los que están relacionados con las habilidades cognitivas, se encontraban en el cromosoma X. De hecho, no es casualidad que la discapacidad mental sea un 30% más común en el género masculino.

Sin embargo, quizá uno de los resultados más interesantes en este sentido proviene de un análisis longitudinal llevado a cabo en el Medical Research Council Social and Public Health Sciences Unit de Estados Unidos. En este estudio se entrevistaron anualmente desde el año 1994 a 12.686 jóvenes con edades comprendidas entre los 14 y los 22 años. Los investigadores tuvieron en cuenta diferentes factores, desde el color de la piel y la educación hasta el nivel socioeconómico. Así descubrieron que el mejor predictor de la inteligencia era el C.I. de la madre. De hecho, el C.I. de los jóvenes se apartaba tan solo una media de 15 puntos del de sus madres.

La genética no es la única responsable
Si nos apartamos del ámbito genético, también podemos hallar otros estudios que desvelan que la madre desempeña un rol importante en el desarrollo intelectual de sus hijos, a través del contacto físico y emocional. De hecho, algunos estudios apuntan que el apego seguro está íntimamente vinculado a la inteligencia.
Investigadores de la Universidad de Minnesota, por ejemplo, encontraron que los niños que han desarrollado un apego seguro con sus madres desarrollan un juego simbólico más complejo a la temprana edad de dos años, son más perseverantes y muestran menos frustración durante la resolución de problemas. 
Esto se debe a que el apego seguro les brinda a los niños la seguridad necesaria para explorar y la confianza suficiente como para resolver problemas sin desanimarse. Por otra parte, estas madres también les suelen proporcionar a los niños diferentes niveles de ayuda en la resolución de problemas, los cuales contribuyen a estimular aún más sus potencialidades.

La importancia de la relación afectiva para el desarrollo del cerebro ha sido demostrada por investigadores de la Universidad de Washington, quienes desvelaron por primera vez que un apego seguro y el amor de las madres es fundamental para el crecimiento de algunas partes del cerebro. Estos investigadores analizaron durante 7 años la forma de relacionarse de las madres con sus hijos y descubrieron que cuando estas apoyaban emocionalmente a los niños y satisfacían adecuadamente sus necesidades intelectuales y emocionales, a los 13 años el hipocampo de estos pequeños era un 10% mayor que el de los niños que tenían madres distantes emocionalmente. Vale aclarar que el hipocampo es una zona del cerebro vinculada con la memoria, el aprendizaje y la respuesta ante el estrés.

¿Podemos hablar realmente de inteligencia heredada?
Se estima que entre un 40-60% de la inteligencia es heredada. Esto significa que el porcentaje restante depende del entorno y la estimulación. De hecho, la inteligencia no es más que la capacidad para resolver problemas. Sin embargo, lo curioso es que para resolver problemas, incluso un problema matemático o físico, también entra en juego el sistema límbico pues nuestro cerebro funciona como un todo. Por tanto, aunque la inteligencia es una función que está íntimamente relacionada con el pensamiento racional, también influye la intuición y las emociones, que genéticamente hablando, es el punto en el que entra la contribución del padre.
Por otra parte, no debemos olvidar que aunque un niño tenga un elevado C.I., es necesario estimular esa inteligencia y alimentarla a lo largo de la vida con nuevos retos que representen un desafío constante. De lo contrario, la inteligencia se estancará.
Más allá de lo que afirme la genética, los padres no se deben desanimar porque también pueden contribuir mucho al desarrollo de sus hijos, sobre todo estando disponibles emocionalmente y convirtiéndose en su modelo. El C.I. con el que nacemos es importante, pero no determinante.

sábado, 16 de abril de 2016

Porteo, ventajas y beneficios de llevar al bebé en contacto directoEl porteo crea un sentimiento de protección y transmite tranquilidad

Llevar al bebé cerca es una experiencia maravillosa que crea un sentimiento de protección y el inicio de una estrecha relación entre hijos y padres. Poder estar tan cerca del porteador (madre-padre) transmite mucha tranquilidad a los bebés, que se sienten seguros y protegidos.
Los sistemas de porteo para los bebés, como los fulares o las mochilas portabebés, favorecen una buena posición para el bebé. Esta posición es conocida como la postura de la ranita, que se consigue cuando tenemos el culito del bebé al nivel de nuestro ombligo y su cabeza debajo de nuestra barbilla, sin que llegue a tocarnos.
Beneficios del porteo para los bebés
- Lloran menos: los bebés que son porteados son más tranquilos y lloran menos.
- Duermen mejor: se ha demostrado que los bebés con los que se ha usado el método canguro aumentan más rápido el peso y duermen mejor.
- Tienen mejor desarrollo psicomotor: el constante balanceo genera en los niños mejor equilibrio y mejor control postural, debido a que su cuerpo se va adaptando a nuestro movimiento..
- Los cólicos disminuyen. Llevar al bebé en posición vertical (vientre contra vientre) beneficia mucho a su sistema digestivo, que aún es inmaduro y facilita la expulsión de gases. 
- Son más sociables. El bebé se integra en la vida cotidiana, participando en lo que el adulto hace;  en los paseos y charlas. 
Beneficios para los papás y mamás porteadores
Este método de llevar a los bebés muy pegaditos al cuerpo de los papás es muy práctico porque nos deja las manos libres para poder hacer cualquier cosa. Los fulares y mochilas portabebés reparten muy bien el peso en la espalda, por lo que estaremos cómodos y, al mismo tiempo, nos permite descansar los brazos.
1. Fortalece los vínculos. El contacto continuo favorece una relación muy especial entre el bebé y la madre, ya que la cercanía del recién nacido provoca la secreción de una serie de hormonas, como la oxitocina y la prolactina. Además, previene la depresión posparto, ya que el contacto directo aumenta el nivel de otras hormonas, como lasendorfinas.
2. Aporta seguridad. Los porteadores que llevan a sus bebés pegados a sus cuerpos se sienten más seguros y confiados porque serán capaces de reconocer más rápidamente las señales del bebé e identificarlas (sueño, hambre, cansancio...).
3. Beneficia la lactancia materna. Llevar al bebé cerca provoca que la madre segregue oxitocina, lo que favorece la subida de la leche y un buen establecimiento de la lactancia materna.  
4. Tonifica los músculos de la espalda. El peso total del niño está sostenido por elportabebés, y se reparte por toda nuestra espalda. De esta manera, nuestro cuerpo se va adaptando progresivamente al peso del bebé, lo que contribuye a fortalecer nuestra musculatura y a tener un mejor control postural. Con todo esto, prevenimos los posibles dolores de espalda provocados por coger a los niños en brazos, ya que usamos solo un brazo y forzamos posturas incorrectas para nuestra espalda.
Portear al bebé es bueno para su desarrollo fisiológico 
- Estimula todos los sentidos del niño
- Refuerza la relación entre padres e hijos
- Supone menos carga para los padres
- Aumenta la libertad de movimiento para la familia
- Soporta al bebé con toda la seguridad y confianza que necesita
Posición correcta para el bebé
1. Sostén: el bebé es llevado como un vendaje contra el cuerpo del portador.
2. Espalda: la columna vertebral del niño está recta y el niño erguido. Para mantener esta correcta postura, el bebé irá siempre mirando al portador, ya que si mira hacia fuera no mantenemos una buena postura de la espalda.
3. Piernas: deben estar flexionadas abiertas a 90º. Favoreciendo la posición de ranita para rodear al portador. Las rodillas deberán estar más altas que el culito del bebé.
4. Cabeza: si es muy bebé y aún no la sujeta, deberemos subir más las piernas y usaremos portabebés que cubran la cabeza.
Niveles de soporte
Recién nacidos (0-3 meses): deberán estar sujetos hasta la cabeza, suavente contra el pecho del portador.
Bebés mayores (3-8 meses): irá sujeto hasta el cuello
Niños (8 meses en adelante): irán sujetos hasta el hombro.
Debemos tener en cuenta que tenemos que estar cómodos los dos, tanto el bebé como el portador. No hay ningún portabebés perfecto, hay que elegir el que mantenga al bebé en la buena postura (ranita) y que a nosotros nos resulte cómodo.

viernes, 15 de abril de 2016

Cómo preparar a los niños para la llegada de un hermanito

Cuando ya tienes un hijo y descubres que estás embarazada, sabes muy bien qué es lo que eso representa en tu vida, pero lo que la mayoría de las madres no se dan cuenta es realmente lo que un hermano va a representar para la vida del primogénito de la familia.
Tal vez cuando eras pequeña, hayas vivido una situación similar pero seguro que no te acordarás. Yo, como primogénita, no me acuerdo, aunque creo que no debe ser muy agradable el tener que 'renunciar a la corona'.
Se debe preparar a los niños para todo
Se debe preparar a los niños para todo. Creo que con el diálogo se puede hacerlo, aparte de solucionar muchas situaciones difíciles o complicadas de la vida. Nada como una buena charla paraexplicar al primogénito que la familia va a tener un nuevo integrante. Prepara a tu hijo para la llegada del hermano:
- Dar con alegría la feliz noticia y comunicar al niño que, próximamente, va a tener un hermanito. El tono así como la forma de hacerlo dependerá mucho de la edad que tenga tu hijo. Si es muy pequeño, lo mejor es decirle que tu barriga va crecer porque allí está creciendo un hermanito para él. A los niños más mayores, ya capaces de comprender muchas cosas, lo mejor es implicarles y convencerles de las innúmeras ventajas que es tener un hermano.
- Estimular al niño a colaborar. Pedirle que cante o que hable con su hermano que aún está dentro de tu barriga, para que el bebé vaya conociendo su voz y sus gustos. Además, hágale partícipe del crecimiento del feto. Ensénale la foto (ecografía) del su pequeño hermano, pide su ayuda para elegir el nombre de bebé, para comprar su ropita o decorar su habitación. Es aconsejable también que oriente a tu hijo para que se compre un regalo a su hermanito.
- Los celos son inevitables, pero se puede aligerarlo transmitiendo aún más afecto y seguridad al primogénito. Busca que su vida siga la misma de siempre. Conserva el hábito de acompañarle al parque, de contarle cuentos, y por ningún motivo, debes recriminarlo cuando tenga un "ataque" de celos. No te olvides de que la llegada de un hermano es un cambio duro para él y que el bebé que esperas vendrá a sumar y no a restar.

jueves, 14 de abril de 2016

El bebé

"Puede considerarse a los bebés como la materia sin refinar de una personalidad.  Cada uno de ellos nace con un programa genético y con una variedad personal propria. Se trata de un cuerpo programado para desarollarse en algunos direcciones,  pero de ninguna manera ha de considerarse que se trata de un programa invariable. Se puede pensar en el bebé como un proyecto interactivo que no puede desarrollarse por sí solo."
" Aunque el bebé es una criatura inmadura en muchos aspectos,  sus células están programadas  para poder llegar a desarollarse una vida compleja

miércoles, 13 de abril de 2016

Viene un hermanito

Dar la noticia de la llegada de un hermano a un niño de dos a tres años puede ser fácil, pero también frustrante.
Los padres nos planteamos preguntas del tipo: ¿Cuándo y cómo decírselo para que lo entienda y no se sienta destronado? ¿Qué hacer para que no tenga celos del bebé? Conocer las respuestas nos será de gran utilidad.
No sirve de nada contárselo muy pronto porque es muy pequeño para entender algo que no sea tangible. Tampoco es adecuado esperar hasta el último momento, porque al ver los cambios imaginará todo tipo de elucubraciones. Lo mejor es contárselo entre el cuarto y quinto mes de embarazo.
Quizás pensemos que una vez dicho, problema resuelto. Pero no es así, a partir de ese momento se sucederán innumerables retahílas de porqués encaminados a saciar su curiosidad. Los especialistas aconsejan dar respuestas claras, sencillas y firmes, olvidarse de la cigüeña y analogías del estilo.

Los celos son normales
Aunque el niño oiga que nada va a cambiar con la llegada del hermanito y que papá y mamá le van a seguir queriendo igual, su miedo a lo desconocido, a esa reorganización total de la familia provoca celos. Es una reacción natural ante una situación de pérdida de poder, de atención y de amor (o por lo menos así lo cree él).
No hay que preocuparse en exceso: en la mayoría de los casos, los celos no son ni tan graves ni tan duraderos como los padres pensamos. Es la forma que tiene el pequeño de expresar sus sentimientos por los cambios, y lo habitual es que desaparezcan cuando se acostumbre a ellos. Pero de momento, piensa que ese intruso ha llegado para sustituirle. Este sentimiento es normal y necesario: un niño que no expresa ningún tipo de celo, por pequeño que sea, puede que esté escondiendo algún otro problema.
El niño pasará por tres etapas antes de acoger a su nuevo hermano:
Protesta. Es la etapa inicial. El pequeño utilizará todo lo que tenga a mano para recuperar esa atención de los padres que antes conseguía sin ningún esfuerzo.Desesperación. Ante la falta de respuesta a sus demandas (su hermano sigue en casa) se desespera y puede mostrar cierta ansiedad.Adaptación. Por fin, el pequeño se resigna y poco a poco se va acostumbrando a la nueva situación.

Cómo se manifiesta el hermano mayorEl comportamiento:Muchos usan la desobediencia, el llanto o el incordio al hermano (le quitan el chupete, le empujan...) para llamar la atención. Estas reacciones son una especie de castigo al 'nuevo' y a sus propios padres.Pueden volverse más retraídos o tímidos: el pequeño evita el contacto con otros niños o adultos y prefiere jugar él solo. Tanto cambio le hace sentir inseguro.Distintas formas de regresión: pide de nuevo el chupete si ya lo había dejado, habla peor o vuelve a hacerse pis. Cree que si es como antes de que naciera el hermanito, todo volverá a la normalidad.La alimentación: adaptarse de golpe a la llegada de un hermano es estresante. Y ese nerviosismo causa en ocasiones trastornos de su conducta alimentaria. Puede mostrarse totalmente inapetente o comer con un ansia inusitada. En realidad no es más que otra llamada de atención, pero suele resultar más alarmante para los padres. Por suerte, este tipo de conducta no suele prolongarse en el tiempo.El sueño: es muy común que el estrés altere su sueño. Puede tardar en dormirse, despertarse en mitad de la noche con pesadillas o levantarse mucho antes que de costumbre. En cuanto el pequeño se adapte a la nueva rutina y a la presencia de un nuevo miembro en la familia, lo normal es que estos problemas desaparezcan solos.

Cómo reducir sus efectos
Aunque se trate de una situación transitoria, lo cierto es que los celos pueden traer de cabeza a más de un padre. Manejarlos bien ayudará al niño a adaptarse más rápido y mejor a la nueva situación.
Es fundamental no ridiculizar los sentimientos del pequeño para no hacerle sentir que ya no nos preocupamos por sus cosas. Para él son muchos cambios de pronto, hay que darle tiempo para que los vaya asimilando.Habrá que mantener en lo posible sus rutinas leerle un cuento antes de dormir o salir al parque el sábado por la mañana si es lo que venía haciendo antes de la llegada del hermano.Será bueno ignorar sus malos comportamientos (no premiar esas llamadas de atención con nuestra preocupación o enfado) y alabar su conducta cuando nos ayude a su manera con las tareas del cuidado del hermano menor.Hay que sacar tiempo para dedicárselo en exclusiva (cantarle una canción mientras hacemos recados no cuenta).Explicarle que papá y mamá le quieren exactamente igual que antes aunque no puedan dedicarle todo su tiempo. Usa ejemplos cotidianos: si el niño tiene dos juguetes preferidos, un oso de peluche y una pelota, se le puede preguntar si cuando juega con el oso quiere decir que ya no quiere la pelota o al contrario.

jueves, 7 de abril de 2016

¿Por qué es tan importante?

Al introducir la fruta en su dieta, tu hijo se familiariza con otros sabores y su organismo se prepara para tolerar mejor otros alimentos diferentes a la leche.

Las frutas, además, le aportan vitaminas, sobre todo vitamina C y betacarotenos (presentes en las de color naranja o rojo), que ayudan a mejorar las defensas del bebé.

También contienen mucha agua y fibra, que mejora el tránsito intestinal. Por ejemplo, la naranja es estupenda para combatir el estreñimiento: si tu bebé tiene este problema, puedes añadir a su papilla más naranja y pera y menos plátano y manzana.

Y, al contrario, si tiene diarrea, prepárale el puré sólo con manzana y plátano.

Debe seguir tomando leche

No obstante, según pasen las semanas recuerda que “al introducir nuevos alimentos en la dieta del bebé tiende a reducirse la cantidad de leche, por eso conviene que algunos días le sigas dando purés de frutas con una base de leche o, más adelante, de yogur”, dice la asesora.

Siguiendo estas pautas, los purés de frutas que le prepares serán los mejores para tu bebé. Y no olvides la opción de los tarritos: mantienen las propiedades nutricionales, no llevan conservantes y son muy prácticos si salís al campo, le das de merendar en el parque...

En definitiva, no puedes privar a tu hijo de las frutas, que son una fuente excelente de vitaminas. Eso sí, deberás tener mucha paciencia hasta que las acepte; piensa que su sabor es totalmente diferente al de la leche.


miércoles, 6 de abril de 2016

¿Qué hago si no le gusta?

¿Has añadido a la papilla de frutas leche templada (materna o de fórmula) e incluso así tu pequeño se niega a tomarla? Existen algunos trucos que puedes poner en práctica:

Cocer la fruta

Al principio, si el niño rechaza la papilla una medida eficaz puede ser cocer ligeramente las frutas para facilitar su introducción y luego ir aumentando la cantidad de fruta fresca de una manera progresiva.

Por ejemplo: cocina al vapor media manzana pelada durante unos cuatro minutos a fuego medio, tritúrala con 60 ml de leche templada y ofrécesela al niño. Al día siguiente haz el puré con un cuarto de manzana cocida y un trozo de manzana cruda, y al siguiente añade más cantidad de fruta cruda y menos de fruta cocida.

Actúa así hasta lograr que el niño se acostumbre al sabor de la papilla elaborada totalmente con fruta fresca, porque al cocer este alimento se pierden vitaminas.

No debemos olvidar que “el objetivo es introducir un buen aporte vitamínico en su dieta a través de la fruta fresca”, explica la nutricionista Anabel Fernández.

Diluirla con más leche

Otro truco que funciona si el niño rechaza el puré de frutas es aumentar la cantidad de leche y hacer una papilla diluida. Así la aceptará mejor porque el sabor de la leche predominará sobre el de la fruta.

Y una vez que la tome bien, ve aumentando la cantidad de esta última y reduciendo la de leche.

Mezclar con cereales

Prueba a añadir un cacito de los cereales que tome el niño (cerciórate de que no llevan gluten si aún no lo toma). De todas formas el objetivo es que el peque se acostumbre al sabor natural de las frutas; si utilizas este truco, reduce poco a poco la cantidad de cereales en la papilla hasta que el puré sea sólo de frutas.


martes, 5 de abril de 2016

Cómo introducir la fruta en su dieta

Si comienzas dándosela en puré

Para comenzar a darle la fruta en puré debes tener en cuenta una norma básica: ofrecerle papilla de una sola fruta y, si la tolera bien durante tres o cuatro días, incorporar otra diferente.

¿Por qué? Porque si mezclas varias frutas y alguna de ellas le provoca alguna reacción adversa (alergia o intolerancia), no podrás saber cuál de ellas es.

¿Cómo logro que la acepte?

Un secreto para que estas papillas sean bien aceptadas es ponerles una base de leche (materna o de fórmula), ya que se trata de un alimento bien conocido por el pequeño. Y si es leche templada, mucho mejor.

“El rechazo al puré de frutas suele darse porque la primera papilla que se ofrece al bebé es una mezcla de zumo de naranja con manzana, pera y plátano.

Y algunos niños que están acostumbrados únicamente al sabor de la leche, un alimento líquido, templado y neutro tirando a dulce, reaccionan con desagrado al ser sorprendidos con un alimento frío, ácido y totalmente desconocido. Para evitar este choque se puede poner un poco de leche templada en el puré de fruta”, aconseja la nutricionista.

Cuáles y en qué cantidad

Conviene comenzar con la manzana o la pera, frutas de sabor suave y dulce, y luego ir incorporando el resto, como el plátano, la naranja... (ya sabes, de una en una y de forma paulatina). Cuando las haya aceptado puedes preparar la papilla con otras frutas: uvas, sandía, ciruela, cerezas...

Las que debes evitar ahora son el kiwi, las fresas, el melocotón y el albaricoque, las frutas del bosque y las tropicales, porque pueden producir alergia. En todo caso, a la hora de comprar las frutas escógelas maduras, en su punto justo (ni muy verdes ni muy pasadas) y utilízalas desechando el corazón y la piel.

Por otra parte, tan importante como elegir con atención los componentes de sus primeras papillas de frutas es tener una actitud adecuada a la hora de ofrecérselas al bebé: procura que tu hijo te vea alegre y confiada y no muestres enfado si al principio se niega a probarlas, porque si te nota intranquila o con dudas será más fácil que rechace el nuevo alimento.

Y en cuanto a la cantidad que debe tomar, ten en cuenta lo que acepta y no te desesperes si no se lo come todo: ve poco a poco. Si tienes paciencia al final se acostumbrará al nuevo sabor y la nueva textura y se comerá todo con gusto.


lunes, 4 de abril de 2016

Sentarse

SentarseEl sentarse por sí mismo le da a tu bebé una nueva perspectiva del mundo. Una vez que ha fortalecido los músculos de su cuello y brazos lo suficiente para mantenerse erguido y ha aprendido dónde colocar sus piernitas para no tropezarse, es sólo cuestión de tiempo hasta que empiece a gatear, pararse ycaminar.
Cuándo comienzaTu bebé probablemente empezará a sentarse por sí solo entre los 4 y 7 meses. Éste es también el periodo en que aprenderá a darse la vuelta cuando está echado en el suelo y a mantener erguida la cabeza.

A los 8 meses, la mayoría de los bebés pueden sentarse bien sin apoyo durante varios minutos. (Incluso los bebés que dominan la posición de sentados acaban desplomándose, normalmente porque pierden interés en mantenerse erguidos).
Cómo se desarrollaEs cierto que puedes poner y sujetar a tu bebé en posición sentada casi desde el primer día. Pero no se sentará de verdad y por sí mismo hasta que adquiera control de la cabeza. Hacia los 4 meses comienzan a fortalecerse rápidamente los músculos del cuello y la cabeza, y el bebé los empleará para elevarla y mantenerla erguida mientras está acostado sobre su panza.

Lo siguiente que hará es aprender a apoyarse en sus brazos y a separar el pecho del piso, como una especie de miniflexión. A los 5 meses ya puede ser capaz de estar sentado un rato por sí solo, aunque es recomendable que tú estés cerca para ayudarlo. También es recomendable que lo rodees con almohadas para amortiguar una posible caída.

Pronto tu bebé aprenderá a mantener el equilibrio mientras está sentado extendiendo hacia adelante uno o los dos bracitos y apoyándose en ellos. Para los 7 meses, probablemente podrá sentarse sin apoyo (lo que liberará sus manos para explorar el entorno) y aprenderá a girarse para alcanzar los objetos mientras está sentado.

Quizás en este momento sepa ya utilizar los brazos para impulsarse cuando está tumbado sobre su panza y sentarse. Para los 8 meses, lo más probable es que se siente perfectamente sin ningún apoyo.
Qué viene despuésTe puedes imaginar qué ocurre luego de que tu bebé aprende a impulsarse hacia adelante desde la posición de sentado y a mantener el equilibrio sobre sus manos y rodillas. Puede aprender a moverse para adelante (o para atrás) a "cuatro patas" a partir de los 6 ó 7 meses, y a gatear a los 10. A esta edad tu niño ya tiene mucha movilidad y mucha curiosidad, por lo que es muy importante que la casa esté a prueba de niños.

Muchos pediatras recomiendan esperar hasta que el bebé se pueda sentar sin demasiado apoyo para empezar a darle alimentos sólidos.
Tu papelElevar la cabeza y el pecho de tu bebé lo ayudan a fortalecer los músculos del cuello y a desarrollar el control necesario en la cabeza para estar sentado. Le puedes ayudar animándolo a que juegue boca abajo en el piso y llamándolo para que mire hacia arriba.

También puedes mostrarle un juguete sonoro o un espejo cuando está en esa posición para que alce la cabecita; estos objetos, además, sirven para comprobar que su oído y su vistaestán bien.

Una vez que tu bebé se sienta cómodo y seguro estando sentado, coloca juguetes y otros objetos cerca de él —aunque fuera de su alcance— en los que pueda concentrar su atención mientras aprende a mantener el equilibrio con la ayuda de sus brazos.

Como siempre, y especialmente mientras aprende a sentarse, asegúrate de estar cerca de él por si se cae o bien, por si quiere mostrarte sus nuevas habilidades.
Cuándo preocuparseSi ves que tu bebé no es capaz de mantener erguida la cabeza para los 6 meses y todavía no ha aprendido a mantenerse derecho apoyándose en sus brazos, conversa de ello con su pediatra la próxima vez que lo visites.

Los bebés se desarrollan a su propio ritmo, algunos más rápido que otros, pero el control de la cabeza es esencial para poder sentarse independientemente. Y sentarse es fundamental para aprender a gatear, a pararse y a caminar.

Ten en cuenta que los bebés prematuros pueden llegar a estos hitos o momentos claves del desarrollo meses más tarde que los nacidos a término


domingo, 3 de abril de 2016

¿Podrá la dentición de mi bebé afectar a la lactancia?

Buena pregunta! Muchas mamás planean amamantar a sus bebés "solo hasta que le salgan los dientes", y luego se dan cuenta de que seguir dando el pecho durante esta etapa del desarrollo infantil es más fácil de lo que se imaginaban.

La experiencia de la dentición es diferente para cada bebé. Para algunos la incomodidad es tan insignificante que sólo te das cuenta de que le están saliendo los dientes cuando se empiezan a asomar las primeras puntitas blancas en sus encías. A otros se les hinchan tanto las encías que les molesta mucho el dolor, el cual parece aumentar cuando succionan. Sin embargo, la mayoría de los bebés siguen tomando el pecho a lo largo de este periodo doloroso, simplemente porque no sólo es su alimento, sino que es también algo muy reconfortante para ellos.

Si tu bebé deja de tomar el pecho temporalmente (conocido como una huelga de lactancia), esto normalmente sólo durará un par de días. Durante la "huelga", sigue ofreciéndole el pecho a tu bebé siempre que notes que tiene hambre. Si no lo acepta, extráete leche para seguir estimulando tu producción. Si tu bebé tampoco quiere tomar un biberón, aliméntalo con un vasito para bebés.

La dentición también podría interferir con la lactancia si tu bebé empieza a usar tus pechos como un "juguete para morder". A veces la reacción de espanto de la madre es lo suficiente para que el bebé no la vuelva a morder. Si no, fíjate bien cuando tu bebé suelte por un instante el pezón (tiene que hacerlo antes de morderte), y coloca tu dedo entre su boquita y el pezón.

Otra forma de evitar que te muerda es masajeando sus encías con tu dedo antes de darle el pecho. Si lo sigue haciendo, quítale el pecho y dile firmemente "¡no muerdas!". Como los bebés a menudo empiezan a morder cuando ya se han saciado, esto podría indicar que ya ha terminado de comer. Pero si no crees que ha comido lo suficiente, espera al menos unos 15 minutos antes de seguir alimentándolo. Con el tiempo entenderá el mensaje.

Asegúrate de tener varios juguetes para morder a la mano. Los que se enfrían en el refrigerador son un gran alivio para las encías del bebé.

Si de cualquier modo te está costando solucionar el problema de las mordidas, consulta al pediatra de tu niño o a una asesora de lactancia. Con paciencia y apoyo, sobrevivirás a la dentición de tu bebé.


Cuánta leche debe tomar un bebé de 12 meses?

En ocasiones tu bebé pasará por una época de rápido crecimiento y sentirá más hambre. Si durante el desarrollo de tu pequeño tienes alguna ...